Frente a la decisión del Gobierno de un incremento tarifario en el servicio de energía, los comerciantes alertaron los inconvenientes que esto acarreará, pues para pequeños y medianos establecimientos el alza se verá reflejada en el precio de algunos productos vendidos al público.
Si bien los comerciantes de la ciudad aceptaron el llamado del Ministro de Minas y Energía para ahorrar energía por el Fenómeno del Niño, reciben con preocupación esta nueva medida que es para ellos injusta, pues la falta de previsión de algunas entidades gubernamentales afecta a toda la población, aún cuando por años pagaron en sus recibos una tasa de confiabilidad para evitar el aumento en épocas de sequías. Aseguran que durante el año han tenido serias dificultades por el aumento de la Tasa Representativa del Mercado y la desestimulación de la economía, por lo que sumar este aumento perturba aún más el panorama comercial.
Para el director de Fenalco Bogotá Cundinamarca, Juan Estaban Orrego, esta decisión “es inconveniente, improcedente e inoportuna, es un incremento tarifario de un servicio esencial y básico, que va a producir disminución en la productividad. Esperamos que el gobierno revise esta medida”.
Agregó que los comerciantes no reciben ningún tipo de subsidio ni gozan de tarifas preferenciales como en el caso de ciertas industrias, lo que agudiza el impacto del reajuste tarifario del servicio de energía.