¿COMUNISMO EN BOGOTÁ?
¿LA ACTUAL ADMINISTRACIÓN REESCRIBE LA CONSTITUCIÓN?
FENALCO BOGOTÁ CUNDINAMARCA pide al Distrito que exponga argumentos válidos y basados en las leyes colombianas sobre las razones para no entregar el aval al acuerdo que cursa en el Concejo Distrital y que busca poner techo a la base gravable del impuesto predial que los mismos contribuyentes han calificado de exagerado y desmedido.
La posición de la actual administración genera una lucha social y va en contra de la Constitución Política de 1991, pues “sataniza a las personas que con el trabajo de muchos años han conseguido una segunda casa o un local comercial para vivir de esa renta” asegura Juan Esteban Orrego, director ejecutivo de FENALCO BOGOTÁ CUNDINAMARCA. La Carta Política Colombiana garantiza y protege la propiedad privada (artículos 2, 51, 58, 60, 64) y ninguna ley sanciona tributariamente a los multipropietarios.
Con el actual cobro del impuesto predial el Distrito empobrece a las personas que a pesar de tener las propiedades no tienen el dinero por las que éstas son avaluadas. En caso de arrendarlas el propietario está ligado al canon de arrendamiento que no crece conforme al avalúo catastral sino al índice de precios al consumidor (IPC) que fija la ley como máximo incremento; por lo que en ningún caso la capacidad de pago está ligado con la titularidad del predio.
Según datos de FENALCO BOGOTÁ CUNDINAMARCA la variación del avalúo catastral residencial en el último año fue en promedio: 12 veces mayor que el índice de costos de la construcción de vivienda (ICCV), 3.5 veces mayor que el Índice de valoración predial (IVP), 6 veces mayor que índice de precios al consumidor (IPC) y 5 veces mayor que el Producto Interno Bruto (PIB – Nacional).
Evidencia del por qué es necesario reglamentar la base gravable del impuesto predial es que muchos de los dueños de viviendas o establecimientos comerciales deben vender su propiedad para pagar el tributo que para “nosotros es confiscatorio y que termina afectando la economía de la ciudad”, afirma Orrego. El distrito con su posición castiga el desarrollo de la ciudad, “ojalá todos los habitantes de Bogotá fueran propietarios y aún más multipropietarios para buscar y generar progreso a la Capital” concluye el director ejecutivo.